TÜRKIYE

Hablamos de Anatoria o de Asia Menor. Hablamos de Ankara, Konya, Kapadokya, Pamukkale, Ephesus, Kuşadasi, Bursa e Istanbul. 2600 km recorridos de un destino parcialmente desconocido o de uno cargado de misticismo. Hablamos mi cómplice de estár en Europa para luego cruzar un puente y estár en Asia. De la economía número 16 del mundo, de la experiencia del café turco. Hablamos de un país donde una mujer usando minifalda puede ser la mejor amiga de otra que va con un pañuelo en la cara, símbolo de su religión, hablamos entonces de respeto. De Constantinopla, de 73.639.596 de habitantes, de especias, del Imperio Otomano & su majestuosidad, del té de manzana, hablamos también un poco de ti & de mi, de su historia, de las alfombras voladoras, globos aerostáticos, del Boğaziçi, de los Bazars que son una suerte de desorden colectivo que me resulta absolutamente irresistible. Hablamos de un corazón que revienta de felicidad por aún ser capaz de sentir curiosidad & de este destino que en definitiva, goza de tener the best of both worlds.

Respecto a la comida, no se puede dejar de probar la pizza turca y también el kebab. Sé que probar este último puede resultar como algo obvio. Sin embargo, la elaboración del kebab original difiere un poco del que se está acostumbrado a ver en distintos lugares del mundo. Comer alrededor de la torre de Galata está genial, se come un pescado fresco y de preparación simple, ideal. También, no se puede dejar de probar el turkish delight, un dulce particular y único turco como tampoco se puede dejar de lado el té de manzana, suena simple pero una vez que lo pruebas, no lo puedes dejar. Me pareció mucho más rico que el café turco en si pero ahí ya depende mucho del gusto de cada uno. Sin duda, mi lugar favorito para comer son los zocos (mercados). Estos lugares emanan cultura así que mi mejor recomendación es detenerse y observar. Luego, identificar qué se está buscando y negociar. Por sobre todas las cosas, disfrutar haciéndolo y de esta cultura que al menos en mi opinión es mítica.